Ya nos planteamos hace un tiempo si celebrar una fiesta de cumpleaños o fiesta infantil se nos están yendo de las manos o no
Seguramente tú también lo has pensado más de una vez. Bien por la cantidad de invitados que has incluido en tu lista, o por los que has visto en alguna fiesta. En comuniones también es muy normal hablar de esto, la dimensión que han adquirido las fiestas infantiles. Cuántas veces no hemos escuchado eso de «esto ya es pasarse»
En Celebrando.es creemos en la libertad de opiniones y sobre todo, en el respeto a todas ellas. Pero también es verdad que hay situaciones muy extremas que merecen la pena ser mencionadas. Sobre todo si se debe o no pasar factura por no venir al cumpleaños de tu hijo.
1. ¿Es extremo invitar al «malo» de la clase?
Tal vez sí, pero tal vez dice mucho positivo de tí como persona si lo haces.
Tal vez lo «normal» es invitar a quien tu hijo quiera o quieras tú. Lo normal es que los invitados a todos los cumples sean siempre los mismos.
Pero nos consta que hay padres que piensan en esos niños de clase marginados. Bien por su comportamiento o, lo que es peor, por el de sus padres. A esos padres que piensan que «ni el malo es tan malo, ni el bueno tan bueno» les damos un aplauso desde Celebrando.es
Si encima trasmite esos valores de no discriminación a sus hijos… mejor que mejor.
Si sus padres son unos plastas ¿qué culpa tiene él? Eso sí, con los padres ya no sabemos que decirte que hagas 😛
2. ¿Estoy celebrando una fiesta de cumpleaños extrema?
Pues tú verás.
Nosotros creemos que para saber la respuesta habría que hacerse otra pregunta: ¿Porqué lo hacemos? Si es por rivalidad o competitividad o por aparentar… Sí, te estás pasando.
Irte al extremo económico gastando un dinero que en ocasiones no tienes, o emplear un esfuerzo o dedicación sobre natural puede ser muy absurdo. Si por el contrario el motivo es otro… que extreme quien quiera extremar.
Os ponemos un ejemplo: No encontramos donde lo leímos pero hay un testimonio aportado a un artículo similar a este, en el que una madre decía algo así como: «Sí, nos hemos vuelto locos con los cumpleaños. Pero yo he tardado cuatro laaaargos años en tener a mi hija adoptiva en casa tras papeleos y más papeleos. Durante ese tiempo mi hija ha estado en una casa de acogida sin fiesta de cumpleaños alguna. Sin nadie que le recordase lo maravilloso que es ese día en el que ella nació. Sin nadie que le demuestre lo mucho que se alegra porque ella esté en este mundo.
Ya está en casa con nosotros y este año tendrá animadores, una gran tarta, castillos hinchables, muchísimos invitados, confeti y todo lo que se me ocurra para hacerla sentir una reina.»
(Seguimos buscando este comentario en la red, nos conmocionó su punto de vista)
3. ¿Es extremo pedir asistencia obligatoria?
Padres que te piden un compromiso total a asistir a la fiesta de cumpleaños de su hijo. Padres que te pasan la factura si no vas.
Es en serio y es muy real. Y sí, esto sí es extremo, se pasó un poquito el hombre.
Ocurrió en Reino Unido. El padre que celebraba el cumpleaños de su hijo había invitado a uno de sus compañeros de clase, entre otros. Pues bien, este chico a pesar de decir que sí iba a asistir a la fiesta, al final no pudo ir. Este niño mejor dicho, ya que tenía sólo 5 años.
Pues bien el organizador del evento, el santo padre del cumpleañero, ni corto ni perezoso pasó la factura… puedes leerlo aquí
Os seguiremos contando más extremos. Nunca se sabe cuando te puede venir bien habértelos planteado antes.