¿Se nos están yendo de las manos los cumpleaños? Tal vez no

En los tiempos que corren continuamente nos preguntamos si los cumpleaños de los niños se nos están yendo de las manos. Opiniones hay de todos los colores, gustos, puntos de vista, preferencias … ¿Por qué hay que celebrar un cumpleaños por todo lo alto? ¿Y por qué no?

Cuando sale el tema de los cumpleaños se suele escuchar más de un suspiro. Son muchos los temas a los que le damos vueltas: invitar a toda la clase sí o no, si invito me invitan ¿quiero eso? , ¿cuánto me voy a gastar?, «pues cuando yo era pequeño»… 

Esas son las cosas que más agobian a los que piensan que se nos están yendo de las manos. Pero por otro lado hay otros puntos de vista: en su cumpleaños mi hijo se siente protagonista y le sube la autoestima, conoce más a fondo a los amigos de su clase, antes no hacíamos estas fiestas pero tampoco montábamos en bicicleta con ellos, para los niños es su día especial.

Vamos a pensar más en todas estas cosas, seguro que no estaremos todos de acuerdo pero ver otros puntos de vista nos puede ayudar a entender lo que no entendemos.

Los tiempos cambian, igual no se nos están yendo de las manos…

Es cierto que antes los cumpleaños eran bien distintos, se hacían en casa con la familia prácticamente. Pero los tiempos cambian y nosotros con ellos. No hay más que pensar que si los nuestros eran en casa con tarta y refrescos  los de nuestros padres (los abuelos de hoy) casi que no se celebraban. ¿Por qué ese cambio de nada a la tarta? ¿ Y por qué el cambio de la tarta familiar a los parques de bolas?

Ahora trabajamos padres y madres, los niños van al colegio por la mañana y a más de una actividad por las tardes.  Llevan un ritmo totalmente diferente. Y cuando llega un día así, especial, desean gritar a los cuatro vientos que ese es su día, sólo de ellos. Sentirse protagonista. Entre tanto ruido de la sociedad sienten que todo se detiene para ellos el día de su cumpleaños.

Y muchos dirán ¿protagonista? Está demostrado por psicólogos que sentirse así les sube la autoestima. Pero además les hace felices y en la infancia es lo más importante.  

Con esto no decimos que los cumpleaños tengan que ser a lo grande, decimos que quien decide hacerlo así tiene motivos. Nadie lleva la razón absoluta en su opinión.

Todas las opiniones deben ser respetadas, quien quiera hacer una fiesta íntima en casa y quien decida darle a su hijo un día de ensueño. El sentido común es lo que debe prevalecer. No debería cambiar los valores que le inculquemos a nuestros hijos. Debemos ser fuertes en la educación que hayamos decidido darle pero no está mal adaptarse a los tiempos dentro de las posibilidades de cada uno.

Los regalos

Otro tema estrella es el de los regalos. ¿Cuánto me tengo que gastar en cada cumpleaños…? también da para mucho, mira este artículo que habla sobre los regalos en grupo. Es una opción que sólo tiene ventajas: cómodo, económico y práctico. Si te encantan los regalos prácticos pincha aquí y si la originalidad es lo tuyo te damos ideas.

Sobre a quién invitar y a quién no también hay muchos puntos de vista, si os parece lo vemos en otro artículo ya que creemos que merece la pena pararse a pensarlo bien. Es algo muy importante que afecta a todos los niños, queramos o no.

Si todo esto te agobia, tranquilo. No pienses que es para toda la vida. No creas que si cada año vas a más, llegará un momento en el que no sepas cómo celebrárselo ya que cuando lleguen a cierta edad tendrán otros gustos y todo cambia.

Resumiendo, cada uno es libre de celebrar sus fiestas como quiera, no debemos echarle la culpa al entorno ya que somos parte de él.

Respeto y valores deben de ir cogidos de la mano a la felicidad e ilusión con la que se vive los cumpleaños hoy en día.

¿Y ahora qué opinas? ¿se nos están yendo de las manos?

 

 

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